UNA MIRADA AL INFINITO: A MI HIJA MARIA DEL AMOR.

AL INFINITO DE LA PALABRA...

DAME...

Dame... sencillamente...
lo que más te guste,
lo que más te guste....
Dame... solamente...
lo que más te guste
y nada más....
Y es que estás lleno de sombras,
y el sol persiste en la casa,
el nido estaba caliente,
y acabo por enfriar....
A veces duele mentirte la verdad,
y es que te veo acobachádo
como un fiera acorralado,
que solo a mí quiere atacar...
Por eso dame... sencillamente...
lo que más te guste
lo que más te guste....
Dame... solamente...
lo que más te guste
y nada más....

Todos tenemos una voz...
Una voz interior...
No silenciaré.mis sentimientos...
No haré callar a mi voz...
Seré y será lo que tenga que ser,
porque el destino está ahí,en el futuro,
pero sin duda alguna antes viviré el presente,
sin miedos,sin dudas,sin mentiras.Dando todo,
tanto y mucho más,mas allá de las letras,
de tu silencio,incansable corazón,
necesito aprender a llorar.
Mara.

Te invito a soñar en el espacio infinito de mi tiempo,
te invito a que sientas el roce de mis vientos,
a que toques mis estrellas vestidas de esencia
y deletrees una a una las palabras
escritas en este mensaje.
Te invito a que calmes tu locura,
con la paciencia de una madrugada
bebida a sorbos entre palabras mudas,
solo tu sabes despejar la incógnita
que transmiten con su silencio.
Te invito a que inventes mis alas
y las hagas libres,
para cruzar el mar de tu pensamiento
a que labres un sendero firme
donde poder guiar mis pasos sin que se pierdan en la incertidumbre
de un donde y hasta cuando...
Te invito a que me nombres en tus mañanas,a que sigas endulzando el sentimiento,
para seguir soñando,
para seguir queriendo,
para seguir amando,
para seguir viviendo.
♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥
Tiempo.

Mi tiempo se detiene,
intenta modelar mi vida,
por lo que nunca hablo,
por lo que nunca digo,
por lo que tanto siento.
Intenta confesar,
lo que nunca admito...
Y mis letras intentan,
sonreír al presente...
Enero...
Con sus dos miradas,
pasado y futuro,
No hablo de lágrimas,
ni de risas,
Cómplice de mi silencio,
sólo sé que en las afueras,
llueve...Y que sin pretender nada,
no guardaré de nuevo mi voz,
para poder seguir tocando la vida.

UNA MIRADA AL INFINITO

A MI HIJA MARIA DEL AMOR.

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